Una gran cantidad de personas cada día están expuestas a factores que desencadenan el desarrollo del estrés. No se nos ocurrirá a cada uno asociar varias dolencias con un estado psicoemocional severo.
Sin embargo, existen datos confiables obtenidos en el curso de muchos estudios clínicos, que indican que la exposición prolongada al estrés crónico puede tener signos patológicos bastante característicos que surgen de algunos órganos y sistemas. Si uno de estos síntomas se vuelve persistente, entonces tiene todas las razones para hacer cambios en su estilo de vida normal.
Te presentamos los 10 mejores signos sorprendentes de estrés crónico.
10. Dolor de mandíbula
El dolor en la mandíbula no indica necesariamente la aparición de ningún problema dental. Es probable que esta molestia pueda ser causada por el rechinar de dientes sistemático, que generalmente ocurre en un sueño. La causa de la aparición de tal violación puede ser una condición estresante en la que una persona se encuentra durante bastante tiempo. Por supuesto, en este caso, es necesario "golpear" por la razón y no por los síntomas, por lo que el tratamiento debe comenzar con la normalización del entorno emocional. Esto es posible ya sea eliminando la influencia de la fuente de estrés o con la ayuda de psicoterapia y tratamiento farmacológico. Para deshacerse del dolor en la mandíbula durante la duración de la terapia, puede ponerse un protector bucal para los dientes o neumáticos especiales que eviten su rechinamiento.
9. sueños extraños
Los sueños en una persona sana, con el tiempo, adquieren gradualmente un carácter positivo, por lo que generalmente se despierta de un humor relativamente bueno. Sin embargo, bajo la influencia de un factor de estrés, una persona se despierta durante la noche con más frecuencia de lo habitual, lo que permite que surjan imágenes negativas una y otra vez en sus sueños.
8. Alergias peores
Hace diez años, investigadores estadounidenses descubrieron que las personas alérgicas tienen una sintomatología más llamativa de la enfermedad después de sufrir estrés. Esto se debe al hecho de que las hormonas del estrés producidas por las glándulas suprarrenales estimulan la formación de inmunoglobulina E, que a su vez provoca una reacción alérgica.
7. Dolores de cabeza de fin de semana.
Resulta que no solo ser una persona en constante tensión puede dañar su salud, sino que también una salida brusca de este estado "familiar" produce ciertos síntomas. Los científicos de los Estados Unidos descubrieron que muchos trabajadores de oficina, solo los fines de semana, tienen fuertes dolores de cabeza. Surgen como una reacción del cuerpo a un cambio brusco en el régimen del día.
6. sangrado de las encías
Un grupo de investigadores de América Latina demostró que las personas que están periódicamente expuestas al estrés severo tienen más probabilidades que otras de desarrollar enfermedad periodontal. Todo esto se debe a la misma hormona del estrés: el cortisol. Su exceso en la sangre actúa deprimentemente sobre el sistema inmunitario, lo que, a su vez, puede causar inflamación bacteriana de las encías. Por lo tanto, los expertos recomiendan que aquellos que trabajan en la oficina en la mesa, y que están acostumbrados a cenar en el lugar de trabajo, mantengan cerca un cepillo de dientes y un enjuague bucal antibacteriano. Además, como prevención del estrés, deberían dedicar más tiempo a dormir y practicar deportes.
5. dolor abdominal
Un estado persistente de ansiedad puede causar dolor abdominal, así como migrañas, dolor de espalda e insomnio. Los científicos aún no han determinado con precisión la relación fisiológica entre el estrés y la aparición de dolor abdominal, pero existe una teoría según la cual los órganos internos y el cerebro dividen las vías nerviosas. Por lo tanto, en el momento en que ocurre una reacción al estrés del sistema nervioso, los órganos internos reciben la misma señal, lo que causa molestias características en la región abdominal.
Tales síntomas son característicos de otras enfermedades somáticas, por lo que a menudo sucede que una persona que sufre de dolor abdominal crónico es tratada durante mucho tiempo por una enfermedad que en realidad no tiene. La asistencia calificada en tal situación consistirá en una psicoterapia efectiva.
4. Días críticos dolorosos
Las niñas y mujeres afectadas por factores de estrés tienen el doble de probabilidades de sufrir dolor menstrual severo durante la menstruación, en comparación con el sexo justo, que están menos estresadas. Los científicos creen que la razón de esto es un desequilibrio hormonal que ocurre en respuesta al estrés.
3. picazón en la piel
Investigadores de la tierra del sol naciente estudiaron a más de 2,000 personas y descubrieron que la picazón crónica se registra el doble de frecuencia en aquellos que se encuentran en un estado de estrés crónico.
Los dermatólogos han confirmado durante mucho tiempo que las crisis nerviosas empeoran significativamente el curso de enfermedades como la dermatitis, el eccema y la psoriasis. Esto se debe a que una reacción inversa a un estado estresante activa las terminaciones nerviosas que causan una falsa sensación de picazón.
2. No se sabe de dónde vino el acné
Está comprobado que el estrés estimula el desarrollo de enfermedades inflamatorias y la exacerbación de procesos infecciosos crónicos, por lo que a menudo en el contexto de un fuerte estrés emocional, una persona puede tener acné en la cara.
Para combatir esta dolencia, se recomienda usar un humectante y una loción de alta calidad, que incluye ácido salicílico o peróxido de benceno.
1. Deseo de dulces
Probablemente todos escucharon la expresión: "estrés atorado". Por lo general, para este propósito, una persona elige dulces. Y el exceso de hormonas femeninas en la sangre no tiene nada que ver con eso. Un grupo de investigadores estadounidenses realizó una encuesta a mujeres en edad premenopáusica y posmenopáusica, como resultado de lo cual pudieron determinar una pequeña diferencia entre el ansia de dulces antes y después de la menopausia. Por lo tanto, no puede explicarse solo por las características del sistema endocrino.